La violencia en varias regiones de Colombia ha alcanzado niveles alarmantes, y el municipio de Andes, en el suroeste antioqueño, no es la excepción. Recientes sucesos han dejado al descubierto la complejidad de la situación de seguridad en esta localidad, generando gran preocupación entre sus habitantes. A continuación, exploraremos los recientes hallazgos de cuerpos decapitados y las implicaciones de estos actos en la comunidad.
Hallazgos alarmantes en Andes
En un escenario que parece sacado de una película de terror, la aparición de una cabeza humana en San Perucho ha desatado el temor y la indignación entre los vecinos de esta región. Este hallazgo, ocurrido a tan solo 35 minutos del centro de Andes, se suma a un contexto de creciente violencia que ya ha dejado 58 homicidios en lo que va del 2025.
El primer caso, que implicó el descubrimiento de la cabeza, llevó a las autoridades a investigar un segundo asesinato, también en el área rural. Este patrón de violencia genera un ambiente de incertidumbre y angustia en la población, que empieza a cuestionarse sobre la seguridad en su día a día.
Un incremento preocupante de homicidios
Los dos recientes asesinatos han elevado la cifra de homicidios en Andes, que ya era preocupante. Este incremento refleja una tendencia que supera todos los antecedentes históricos en la región. Desde el inicio del año, se han registrado 58 homicidios, lo que sitúa a Andes en un contexto de crisis de seguridad. La violencia ha alcanzado un nivel que preocupa tanto a autoridades locales como a los residentes.
- 58 homicidios en lo que va del 2025.
- 48 de estos crímenes ocurren en zonas rurales.
- 10 homicidios han sucedido en áreas urbanas.
Características de los crímenes recientes
Los detalles de los crímenes son escalofriantes. En el caso de la cabeza hallada en San Perucho, las autoridades no han logrado encontrar el resto del cuerpo, lo que añade un manto de misterio a la situación. En otro incidente, un hombre fue encontrado muerto en una finca de la vereda Líbano, con una decapitación parcial, lo que revela la brutalidad de estos actos. La identidad de las víctimas aún no ha sido confirmada.
Fuerzas de seguridad y criminología local
La Policía de Antioquia ha empezado a investigar la conexión entre estos crímenes y las organizaciones criminales que operan en la región. Entre las hipótesis, se contempla la posibilidad de ajustes de cuentas vinculados al microtráfico y a la lucha por el control de territorios por parte de distintas bandas criminales.
Las autoridades han puesto especial atención en dos grupos criminales:
- La subestructura Edwin Román Velásquez Valle, del Clan del Golfo.
- La banda La Terraza, que opera en Medellín.
El impacto de la violencia en la comunidad
La creciente ola de homicidios ha llevado a la comunidad a enfrentar problemas adicionales, como la falta de bóvedas públicas para el entierro de las víctimas. Desde hace más de ocho años, la disponibilidad de estos espacios se ha reducido drásticamente, lo que ha llevado a situaciones desesperadas. Actualmente, solo quedan 25 bóvedas públicas disponibles, y en septiembre se enterraron 19 personas, la mayoría víctimas de violencia.
El párroco Norberto Gallego Marín ha hecho un llamado a la comunidad, señalando que la preocupación no solo es la falta de espacio para sepulturas, sino el incremento de la violencia que causa tantas muertes.
Conexiones con la violencia regional
Andes no se encuentra aislado en este contexto de violencia. Es parte de una subregión donde cinco organizaciones criminales compiten por el control del territorio y del tráfico de drogas. Este conflicto ha contribuido a que Andes concentre el 25% de los homicidios de su área, lo que intensifica la sensación de inseguridad en la población.
La situación se complica aún más con la llegada de trabajadores temporales durante la cosecha de café, que aumenta la población y, potencialmente, el riesgo de crimen.
Medidas tomadas por las autoridades
Ante esta crisis, las autoridades locales, junto con la Policía, han intensificado sus esfuerzos para combatir estas organizaciones criminales. Se han realizado:
- Capturas de miembros de bandas como La Terraza.
- Incautaciones de drogas y otros elementos relacionados con el crimen.
Sin embargo, las acciones parecen insuficientes frente a una problemática tan compleja. La comunidad expresa su frustración ante la falta de respuestas efectivas por parte del gobierno nacional.
Apuntes sobre el futuro y la esperanza comunitaria
A pesar de los desafíos, la comunidad de Andes muestra resiliencia. La parroquia y las autoridades han comenzado a establecer procesos de exhumación de restos de familiares para liberar bóvedas y evitar el colapso del cementerio. Esta acción refleja la capacidad de la comunidad para adaptarse y buscar soluciones a una crisis que parece no tener fin.
El llamado a la acción y la colaboración es crucial. La violencia no puede ser abordada solo desde un enfoque policial; se requiere una estrategia integral que incluya educación, oportunidades económicas y la participación activa de la comunidad para restaurar la paz y la convivencia en Andes.







